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EL PUNTO G – Descubre como estimularla

El Punto G - Descube como estimular

Se ha hablado mucho acerca del punto G. No es poco habitual que se entienda (mal) como una
especie de botón mágico dentro de la vagina que en cuanto lo encuentras te hace explotar de
placer y tener fantásticos orgasmos solo con la penetración. Y es que hay mucho mito detrás del
punto G, así que… ¡vamos a arrojar algo de luz sobre el asunto!

Aquí encontrarás toda la información que necesitas saber acerca del punto G: qué es realmente,
cómo encontrarlo y estimularlo y consejos para disfrutarlo al máximo.

¿QUÉ ES EL PUNTO G?

La comunidad científica suele definir el punto G como un área de la pared frontal de la vagina, a
unos 3-6 centímetros de la entrada vaginal, que es especialmente sensible a la estimulación y
capaz de provocar orgasmos. Suele añadirse que tiene el tamaño de una moneda y que aumenta
de tamaño y textura con la excitación.

Me parece muy necesario aclarar que el punto G no es una parte de la vagina en sí misma. La
vagina apenas tiene terminaciones nerviosas y, por tanto, cuenta con muy poca sensibilidad. La
única excepción a esto es la abertura vaginal, que en realidad es parte de la vulva, y que es muy
sensible a la estimulación.

Si la vagina tuviera muchas terminaciones nerviosas, sería tremendamente incómodo llevar un
tampón, una copa menstrual o unas bolas chinas. Y ya sabemos que esto no es así. Si tienes vagina,
te animo mucho a introducir un dedo (perfectamente limpio) y a explorar sus paredes prestando
atención a las sensaciones que esto te produce. Luego acaricia cualquier parte de tu vulva, en
especial el clítoris. Comprobarás que la parte externa de tus genitales es infinitamente más
sensible que la vagina.

CÓMO ENCONTRAR Y ESTIMULAR EL PUNTO G

Para encontrar el punto G es imprescindible que haya mucha excitación previa, porque si el clítoris no está erecto, será imposible acceder a sus estructuras internas y lo único que sentirás será la estimulación en la pared vaginal: prácticamente nada.

Una vez alcanzado ese nivel de excitación, es recomendable empezar a buscarlo con los dedos, y no con el pene, porque son más flexibles y más capaces de detectar en qué parte exacta están estimulando. Y además, también podrán estimular con más potencia.

Solo tienes que introducir dos dedos, con la palma hacia arriba, y doblarlos como queriendo tocar el pubis desde dentro. Cada cuerpo es diferente (e igualmente perfecto), y el clítoris no está situado en la misma posición en todas las personas, así que la distancia a la que se encuentre de la abertura vaginal es variable, aunque, a modo de orientación, suele situarse a unos 4 centímetros.

El placer que se logra estimulando el punto G puede ser muuuuy intenso, y extremadamente diferente a la estimulación conseguida con la penetración en sí.

  1. Consigue un nivel elevado de excitación para que el clítoris tenga una erección.
  2. Con la palma de la mano hacia arriba, introduce dos dedos (limpios) en la vagina, a unos 4 centímetros de la entrada (aunque la posición exacta varía de una persona a otra).
  3. Dobla los dedos formando “un gancho”, como intentando tocar el pubis desde dentro.
  4. Deberá ser la persona estimulada la que comunique sus sensaciones, y si además se anima a dar indicaciones en cuanto a velocidad, intensidad y forma de estimular, será todo mucho más sencillo y fructífero.
  5. Importantísimo actuar con delicadeza y cuidado hasta encontrar la estimulación con la que la persona se sienta cómoda. Y también fundamental cortarse las uñas antes, para evitar lesiones en la mucosa vaginal.

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